Esto se acaba y aguarda la guillotina. Siguiente pantalla en el videojuego esperanza o el Apocalipsis Emenike 2.0. La UD Las Palmas recibe al Rayo Vallecano (20.00 horas, DAZN) en un viaje sin retorno. En posición de descenso (18º) y a tres unidades del Deportivo Alavés (17º), que marca el paraíso, a los pupilos de Diego Martínez solo les vale la victoria para ponerse con 35 y esperar los tropiezos de los babazorros ante el Athletic en San Mamés (domingo, 17.30) y del cadavérico Sevilla FC en Balaídos (sábado, 15.15 horas). El plantel de la UD pone la bufanda del Athletic y Celta de Vigo en un finde crucial.
El martes, en el Ramón Sánchez Pizjuán, otra reválida infernal ante los de Caparrós, que cuenta con 38 unidades (seis más que los grancanarios). Para meter presión a los rivales, batir a los de Íñigo Pérez, que llegan sin Pathé Ciss, es la vida. Nteka y Raúl de Tomás completan la lista de ausencias. El partenón de Siete Palmas como el Lourdes de gofio o pequeña meca de los milagros. Es lo que tiene llegar al tramo final sin depender de ti mismo.
Jasper Cillessen. / EUROPA PRESS
Adiós al ‘Robin del gol’
Sin Fábio Silva en la lista de citados y con Cillessen con más rodaje -Dinko quedó retratado ante el Valencia en una de las tardes más disparatadas del curso-, el once puede contar con una sorpresa en el arco. Aquejado de una dolencia en el aductor izquierdo, Fábio se perdió los pulsos ante el Athletic y los de Corberán para sumar 20 días de baja. Trabajo a menor ritmo y un plan de recuperación especial del jefe de los fisios Juan Naranjo. «Está un poco justo», avanzó ayer Martínez, que debe aferrarse a sus particulares estampitas como Oli, Sandro, Moleiro,Javi MuñozEssugo y Bajcetic.
En las últimas 16 jornadas: dos victorias. Un tramo, todo 2025, con pinta de grilletes y mono naranja. El particular Guantánamo para la UD que lleva un curso ciclotímico. Solo hay un triunfo de local en este año y fue colosal ante el Atlético. Un club capaz de lo mejor y de lo peor. Síndrome de Dr. Jekyll y Mr. Hyde hasta la extenuación. En esa manifiesta irregularidad, el problema defensivo exige una revisión urgente (56 goles encajados).
El central del viento
En el Rayo, el majorero Aridane Hernández como figura de morbo y la condición de visitante peligroso (20 puntos lejos de Vallecas). Mientras Martínez saca pecho de sus ocho victorias ligueras -seis fueron el año pasado-, en la grada comienza el recelo. Ambiente fúnebre. El club vallecano, Sevilla y Leganés. Tres pulsos en apenas nueve días. Toda la temporada en 270 minutos con la incógnita del estado físico del cedido Fábio Silva, pichichi e icono. Una velita para Cillessen y otra para Januzaj.
El doble mundialista belga es el monarca de los debates. Atesora clase y encara, elementos en claro déficit en esta UD. Moleiro se diluye y Manu Fuster es un suplente de manual. Sin margen para fustigarse, noche para la resurrección y avanzar con firmeza hacia la tierra prometida. A la siguiente pantalla, que sería Nervión, o desastre. Eviten el apocalipsis. Sin McKenna, la épica se forja desde la retaguardia. Restan entradas para esta final de pánico, tras la controvertida campaña de promoción del club.
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